Antes de nada, darle las gracias a Team Tandem y a la editorial por el envío del ejemplar.

Hace mucho que no leía ficción histórica que tuviese lugar en la Edad Media y cuando se me dio la oportunidad de leer Angelicus no dudé ni un segundo. Misterios, dramas de palacio y una ambientación exquisita es lo que estaba buscando encontrarme y es lo que encontraréis vosotras si os animáis a leer este libro. 

Angelicus nos transporta al siglo XIV, específicamente al turbulento año de 1319, cuando el infante Jaime de Aragón se ve atrapado entre su deseo de ser monje y las expectativas políticas de su familia. A través de intrigas palaciegas, traiciones y un destino marcado por la lucha por el poder, Molina nos presenta una historia llena de personajes complejos y giros inesperados. La boda forzada entre el infante y la infanta Leonor de Castilla, la confesión de fray Pedro de Dios y los oscuros asesinatos, como el de Cecco Usai, alimentan el suspense. Jaime, considerado por la historia como un príncipe loco, es retratado aquí como un hombre lleno de contradicciones y angustias, cuyas decisiones son desentrañadas a través de las voces de personajes como Blanca y Ecart. 

Jaime, un infante atrapado entre su fe y su deber, es el corazón de la novela. La ambigüedad de su personalidad, sus deseos y su desesperación por escapar de su destino lo convierten en un personaje fascinante.  El siglo XIV se presenta vívidamente: la corte de Aragón, las intrigas políticas y las luchas familiares son el telón de fondo de una era llena de supersticiones, violencia y religión. La atmósfera medieval es palpable, y los detalles históricos permiten al lector sumergirse completamente en este periodo convulso.

Es una novela intrigante, con la que poco a poco vas desmenuzando el misterio y no puedes parar de leer. Me ha sorprendido mucho y la verdad es que la recomiendo un montón si alguien le gusta la ficción histórica. Ojalá se hubiese adentrado más en el tema de la quema de brujas, pero aun así me ha emocionado ver que se toca ese tema. 

En resumen, es un libro super completo y que he disfrutado mucho leyéndolo, y hacerlo en compañía es todavía mejor. Así que os recomiendo que vayáis incluyendo Angelicus en vuestra lista de reyes magos.